domingo, 30 de noviembre de 2008

Curiosidades de la sierra central y la sierra sur de nuestro país

Así empezó una particular experiencia con el propósito de fotografiar diversas curiosidades de nuestro país:

Estación del Ferrocarril Huancayo-Huancavelica.





Alrededores de la Plaza de Armas, Huancayo.


Huancavelica

Mina de Santa Bárbara, Huancavelica.

Andahuaylas


Monumento a José María Arguedas, Andahuaylas



Andahuaylas. No se ve muy claro, pero dice: "proximidad de un semáforo". No sé porque esto me llamó la atención.




Alrededores de la Plaza de San Blas, Cusco. Utilizando un lenguaje refinado.





Ollantaytambo, la transgresión no es una particularidad de la capital.

Quisiera aclarar que el propósito de este post es solo distraerme un poco en una época difícil como son los exámenes finales. Además de compartir algunas imágenes divertidas de los lugares más encantadores (aunque en algunos casos un poco olvidados) de nuestro país. La sierra del Perú es un lugar mágico, donde uno puede encontrar las más lindas experiencias. Vale la pena conocerla y disfrutarla.

domingo, 16 de noviembre de 2008

Atahualpa y Pizarro, 476 años después no hemos aprendido la lección


Hoy se cumplen 476 años del encuentro entre Atahualpa y Pizarro en Cajamarca, un hecho trascendental para la historia de América. Un hecho que pese a los años no terminamos de interpretar. En lo que pasó ese día podemos resumir tanto el pasado, el presente y el futuro de nuestra nación (si de verdad existe “nuestra nación”).

Pizarro estaba en Cajamarca. El inca Atahualpa se hacía esperar. Cuando por fin llegó, lo hizo con toda la espectacularidad que debió haber sido propia de un Inca. Momentos después estaban cara a cara fray Vicente de Valverde, cura que debía leer el requerimiento, y Atahualpa.

Entre ambos personajes encontramos un objeto sintomático: un libro. Además, no era cualquier libro; era la Biblia. La cultura occidental (europea) le era entregada al Inca, pero él no entendía para qué servía eso. El representante de España y del viejo mundo, al entregarle el libro al Inca, supone que él debe saber cómo interpretarlo. En la actitud de Valverde no se ve a su libro como una opción, más bien es una imposición. Al Inca no se le preguntó “¿qué tal le parecía el libro?”, se le dijo que ese debía ser el libro bajo el cual de ahora en adelante debía regir su vida y la de su pueblo.

La actitud del Inca es otro hecho sintomático. Recibe el libro, lo abre, pero no descubre nada en él. Ante la incapacidad del libro para producir algún efecto en él, lo arroja. Este acto va más allá de ser solamente una señal de desafío, es una muestra de la inutilidad de ese objeto. Además, de decirle al español que su libro no sirve para nada, se le dice que su presencia no produce ningún temor para él.

Lo que sucede después es conocido por todos: Atahualpa es apresado y empieza el fin del imperio incaico. Pero esa imagen ha quedado en el imaginario popular hasta la actualidad.

Vale la pena recordar algunas conclusiones de Antonio Cornejo-Polar al respecto: “En él [el episodio de Cajamarca] se acumulan y abisman contenidos de enfrentamiento y repulsión, desde el bilingüismo apenas remediado por un lengua precarísimo, casi de ficción, hasta el insalvable desencuentro de la oralidad primaria con la escritura, pasando como es obvio por la mutua y beligerante alteridad de dos conciencias de los dioses, del mundo y de la vida que entran en contacto por vez primera, y todo esto a través de la voz suprema del Inca y de la incontrovertible palabra del sacerdote cuya verdad está escrita, para siempre, en la Escritura de Dios. El episodio muestra con total transparencia, entonces, el tejido del poder que anuda la discursividad colonial, puesto que obviamente se trata de una conquista también semiótica, en la que la palabra hablada en español sojuzga a la voz quechua y ambas, ya jerarquizadas, quedan bajo la autoridad de la escritura, pero esa trasparencia puede ser engañosa...”

“... la letra ingresa en los Andes no como instrumento de comunicación, sino como atributo y encarnación de la Autoridad, como Poder que paradójicamente, siendo lenguaje, se muestra y se impone en su condición de enigma indescifrable. Es dato que debe retenerse.”

La alta cultura, el poder, las letras, occidente, etc. se imponen ante una cultura que ellos consideran inferior. La paradoja está en que este supuesto desarrollo intelectual debería poder lograr que ellos entiendan el mundo como una heterogeneidad, aceptando y respetando las diferencias, en vez de tratar de homogenizarlo. Por otro lado, la cultura andina, oral, pese a quedar subyugada, no acepta la subordinación. Es así como esa resistencia ha perdurado hasta la actualidad.

Antes de concluir quisiera plantear la similitud entre los sucesos de Cajamarca y lo que ocurrió hace un par de años en el Congreso de la República cuando unas congresistas no fueron vestidas de manera "elegante", no eran de tez clara y, lo más importante, no hablaban español. ¿La situación no es similar? ¿No se intenta imponer una cultura sobre otra? ¿Será acaso que no aprendemos de la historia?




Bibliografia:

Antonio Cornejo Polar. "Los discursos coloniales y la formación de la literatura hispanoamericana (Reflexiones sobre el caso andino)". Homenaje a José Durand. Luis Cortest, ed. Madrid: Verbum, 1993.

martes, 4 de noviembre de 2008

Q.E.P.D. Yma Sumac



Yma Sumac siempre va a estar viva para muchos de nosotros. El sábado 1 de noviembre fue su último día en este mundo, pero ella se hace presente de una manera especial. Desde hace más de 50 años ella ha sabido llegar a su público de una forma que no muchos otros artistas pueden hacerlo. Su música va a seguir siendo escuchada, su imagen va a seguir siendo admirada.

Hemos perdido a la diva, pero gran parte de ella está en su obra. Es cierto que ella era una de esas artistas en la que la relación artista-obra se vuelve necesaria, pero también es cierto que su obra es tan espectacular que puede vivir y sobresalir por sí misma.

Ella va a “ser recordada por hacer buena música y por traer felicidad a los corazones de la gente”, tal como quería. Ahora que lo peruano está de moda, deberíamos hacer algo por revalorar su imagen, por difundirla por todos los rincones de nuestro país; para así poder convertirla en un icono capaz de unir a toda nuestra nación (algo que los peruanos necesitamos con urgencia). Blancos, indios, costeños, andinos, selváticos, cultos, pitucos, “high-societies”, ignorantes, cholos, criollos, letrados, tarados, misios, peruanos, peruanos y más peruanos... ¡todos admiremos a nuestra diva!


http://www.yma-sumac.com/audio.htm

http://news.bbc.co.uk/hi/spanish/misc/newsid_7707000/7707526.stm