miércoles, 21 de abril de 2010

Un aplauso para Alianza Lima

Los elogios no paran para Alianza Lima. Primero fue el equipo revelación de la Copa Libertadores, ahora es el favorito para llevarse el trofeo. Y esto no lo digo yo, lo dice la prensa internacional.
Lo que sucedió contra Estudiantes fue un error infantil. No se puede perder por un penal, provocado por una mano inocente dentro del área, al último minuto del partido. Si Alianza quiere hacer grandes cosas, debe adoptar esa actitud de “equipo grande” que a los conjuntos peruanos tanta falta les hace. Pero todavía hay un largo camino por recorrer. La verdadera Copa Libertadores recién empieza. Hay que confiar en el equipo.

“Porque será que te llevo acá adentro
un sentimiento que no tiene explicación

te seguiré toda la vida

porque eres mi pasión

Alianza Lima yo te quiero ver campeón”


A continuación el artículo de Washington Cucurto para ESPNdeportes.com.



¡Con lo justo!
Estudiantes le ganó inmerecidamente a Alianza Lima, la revelación de la Copa

BUENOS AIRES -- No tengo pelos en la lengua para afirmar que Alianza Lima dejó de ser una sorpresa para convertirse en un firme candidato a ganar la Copa.

No importa que en Perú tenga miles de detractores o envidiosos que le envidan su gran momento. El equipo de Gustavo Costas es un equipazo con mayúsculas. Lo demostró ayer ante el equipo más duro de América y de visitante.

Estudiantes nunca pudo llevárselo por delante, más allá de la polenta de Graña, del buen despliegue de Enzo Pérez y de Sosa. (¿Por qué no están en la selección?). De la justeza milimétrica de Verón, que cada día juega mejor. De los 3 ó 4 pulmones que tiene Clemente Rodríguez, para marcar, subir y bajar, todo a la vez. No puedo olvidarme de la entereza de su arquero: Orión, uno de los mejores en su puesto, actualmente.

Con todo esto a Estudiantes le costó y mucho. Digo más: fueron tres puntos inmerecidos. Era un partido para el empate.

Estos dos equipos, recordemos, ya se enfrentaron, hace un mes en Lima y supongo que se volverán a encontrar en semis o finales de esta Copa.

Aquella noche fatídica para todos los argentinos, Estudiantes se comió un pesto casi de película. Fue un 4-1 rotundo. El 1-0 de anoche, casi de casualidad y con mucho traste, hace pensar que el Alianza es más que el equipo de Sabella, por lo menos le ganó en el duelo.

Volviendo al partido de anoche. Estudiantes dominó pero no tenía profundidad, no lastimaba y se perdía en sus propios devaneos. Se enfrentaba ante un equipo muy bien parado de atrás y letal para salir veloz de contragolpe.

De hecho, las dos jugadas más importantes del partido estuvieron en los pies del extraordinario y fuera de lo normal, Wilmer Aguirre, un delantero de otro mundo.

Llevándome un ratito por los comentarios de los peruanos que comentan en este sitio, daría toda la sensación de que a Wilmer, en Perú, no lo quiere nadie. Le machacan su mal paso por el fútbol francés.

Ni siquiera se molestan en apreciar sus impresionantes cualidades. Es ninguneado, bastardeado y despreciado de lo lindo. Por eso, digo que en River, seguro la rompe y puede convertirse en un crack sin precedentes para el fútbol peruano.

A los jugadores hay que verlos en la cancha. Y anoche Wilmer hizo dos jugadas de antología en las cuales no convirtió por muy poco. Pocos pueden hacer esto. En la primera, desbarrancó a medio fondo de Estudiantes, con Verón incluido de ayudante, pero no pudieron pararlo. En la segunda jugada definió mal, pero De Sabato lo miraba de lejos.

¿Pudo haber ganado Alianza Lima? Yo creo que sí, le faltó un poco de suerte y precisión. Pero si Wilmer hubiera convertido alguna de estas jugadas de arriba, hoy estaríamos todos llorando. Hubiera sido una goleada del equipo peruano.

Vayamos un segundo al gol. Un centro, una pelota fácil que un defensor toca con la mano y el árbitro cobra penal. Como se sabe, en tiempo cumplido, la única sanción que debe aplicarse es la del penal. Verón lo ejecutó muy mal y el arquero le contuvo. Y ahí entró a jugar la suerte.

Por lo general, estos rebotes salen para un costado del arco, sin embargo la pelota le quedó servida a Verón en el centro del área y no tuvo inconvenientes para mandarla adentro. Y el partido se terminó.

Agónicamente el equipo de Sabella pudo clasificarse primero del grupo. De ahora en más, deberá sincronizar mejor su línea de ataque. Precisión y contundencia, le falta al Campeón de América.

Seguramente habrá otra gran oportunidad para estos dos equipos en la Copa. Se verán las caras nuevamente. En Lima, ya sabemos, es casi imposible que Estudiantes le gane al Alianza.

En Buenos Aires, en Quilmes, por ahora cuesta.


Washington Cucurto es escritor y poeta. Aunque su nombre real es Santiago Vega, él prefiere que lo llamen simplemente \"Cucu\". Su obra siempre recurre a las minorías y a los marginales y entre sus publicaciones se destacan Cosa de negros (2003) y Las aventuras del señor maíz (2005). Además creó Eloisa Cartonera, una editorial que publica libros de autores inéditos latinoamericanos, realizados con cartón. Actualmente está terminando una biografía de Don Ramón, personaje del Chavo del 8.

http://espndeportes.espn.go.com/news/story?id=1006067





Verón todavía sueña con nosotros.